Medellín construye un cordón de aire a su alrededor, con el ánimo de lograr un encuentro del campo y la ciudad. El corregimiento de Santa Elena, ubicado al oriente, cuenta con un extenso espacio de zonas verdes y húmedas en las cuales avanza un proyecto de gran magnitud que incluye seis parques ecológicos y al mismo tiempo turísticos recogidos bajo un mismo nombre: “Parque Regional Ecoturístico Arví”, “una excelente oportunidad para reconciliarse con la naturaleza e impulsar el turismo”, según explica Diana Lucía Alzate Alzate.
Arví proviene de un vocablo indígena que significa Bocachico, se llama así como símbolo de una leyenda que se remonta a la época de la colonización donde los españoles buscaban el “Valle Arví”, el cual poseía una gran riqueza en oro y sal, aunque el origen de la palabra en sí y su significado aún esta por descubrirse.
Corantioquia, autoridad ambiental administradora para el desarrollo armónico de los recursos de 80 municipios de Antioquia ha identificado en algunas zonas de la región ambientes naturales que por sus características particulares de flora, fauna, belleza paisajística y patrimonio histórico-cultural deben ser preservadas y manejadas para el disfrute de las generaciones presentes y futuras de la región Antioqueña las cuales denomina “Áreas protegidas”, razón por la cual Arví ha sido declarada como una de ellas.
En el año 2001, Corantioquia, crea el Plan Maestro Regional Arví que tiene como objetivo principal “conservar un cordón verde cercano a la ciudad” para evitar la fusión del área rural que comprende los municipios de Bello, Copacabana, Guarne, Rionegro, Envigado y el corregimiento de Santa Elena, con la zona urbana, Medellín área metropolitana, además de “construir una cultura de disfrute contemplativo y de conservación ambiental y aprovechar la vocación turística de la zona, como los miradores, la flora y fauna existente y la tradición campesina de sus habitantes”, explicó: Isabel Cristina Buriticá, directora general del proyecto.
Este proyecto, hoy, está en proceso de actualización y avance donde las entidades territoriales Corantioquia y Cornare en conjunto proyectan la construcción de un parque que va a poseer 1.761 hectáreas (Ha.) dentro lo constituido como área protegida denominada Arví, que en su totalidad cuenta con 11.248 Ha. de suelo verde.
El parque contará con seis núcleos: Biodiversidad, La Represa, Histórico y Cultural, El Tambo, La Laguna y Mazo. Serán temáticos, recreativos y de estudios medio-ambientales, bajo la dirección de entidades como la Gobernación de Antioquia, Confama, Comfenalco, Área Metropolitana y algunas universidades del departamento.
El Metro de Medellín construirá la tercera línea de Metrocable desde la estación Santo Domingo hasta el corregimiento Santa Elena. El proyecto vinculará a los turistas en forma directa con el futuro Parque Arví, facilitando el desplazamiento de los mismos hacia el espacio ecoturístico que hoy se encuentra en vía de desarrollo.
Beneficio para unos, perjuicio para otros
Hablar con los habitantes de la zona denota un sinnúmero de sensaciones encontradas. Aún cuando la comunidad ve el proyecto como una oportunidad también siente incertidumbre con respecto a los cambios generados en su entorno.
“Yo lo veo como una oportunidad, en lo económico y turístico será positivo para la zona pero hay que tener cuidado que este turismo no impacte y se pierda la identidad, las costumbres y tradiciones de la región y no se influencie de los que vienen de afuera… lo más importante son los valores y la idiosincrasia de la comunidad”, afirma Juan Camilo Soto, guía turístico y habitante de la zona.
“Estamos a la expectativa de lo que va a pasar aquí, queremos conservar la tradición y tranquilidad que nos caracteriza, conservar la identidad campesina echada pa’ adelante y esperamos que se genere empleo para los habitantes del corregimiento”, argumenta Diana Lucía Alzate Alzate, líder comunitaria de la vereda Mazo correspondiente al territorio Arví
Estos son algunos pensamientos que hoy tienen los habitantes de Santa Elena, quienes le dan relevancia al proyecto Parque Arví, considerado como una buena posibilidad de progreso y reconocimiento, pero que a la vez se muestran inseguros y algunos otros reacios frente el impacto social, cultural y ambiental que se pueda generar en determinadas comunidades veredales.
Huele a naturaleza
Arví, un entorno ambiental constituido casi en su totalidad por espacios naturales de bosques húmedos en los cuales se encuentran 46 senderos ecológicos y prehispánicos establecidos por la misma comunidad, y con el apoyo de Corantioquia, gracias a la belleza paisajística que se encuentra en ellos, es un espacio que permite un encuentro reflexivo y de tranquilidad con el ser, el cual invita al respeto y la preservación de los pulmones verdes que ofrece la madre naturaleza.
En su entorno se puede encontrar variedad de paisajes, miradores, charcos, lagunas, patrimonios arqueológicos y especies de fauna y flora como las orquídeas, helechos, musgos, y una gran variedad de árboles “alta grande” en una aproximación de 600 especies, además de mamíferos, reptiles y aves como el barranquero, siendo éste el más característico de la región.
Un ambiente ecoturístico es un espacio en el que se privilegia la conservación y apreciación del medio, tanto natural como cultural. Esto es lo que busca Corantioquia con el proyecto Parque Regional Ecoturístico Arví, ofrecer un espacio con enfoque en la preservación de los ambientes naturales de más relevancia en el departamento de Antioquia y además una opción de inclusión turística para la sociedad.
Arví proviene de un vocablo indígena que significa Bocachico, se llama así como símbolo de una leyenda que se remonta a la época de la colonización donde los españoles buscaban el “Valle Arví”, el cual poseía una gran riqueza en oro y sal, aunque el origen de la palabra en sí y su significado aún esta por descubrirse.
Corantioquia, autoridad ambiental administradora para el desarrollo armónico de los recursos de 80 municipios de Antioquia ha identificado en algunas zonas de la región ambientes naturales que por sus características particulares de flora, fauna, belleza paisajística y patrimonio histórico-cultural deben ser preservadas y manejadas para el disfrute de las generaciones presentes y futuras de la región Antioqueña las cuales denomina “Áreas protegidas”, razón por la cual Arví ha sido declarada como una de ellas.
En el año 2001, Corantioquia, crea el Plan Maestro Regional Arví que tiene como objetivo principal “conservar un cordón verde cercano a la ciudad” para evitar la fusión del área rural que comprende los municipios de Bello, Copacabana, Guarne, Rionegro, Envigado y el corregimiento de Santa Elena, con la zona urbana, Medellín área metropolitana, además de “construir una cultura de disfrute contemplativo y de conservación ambiental y aprovechar la vocación turística de la zona, como los miradores, la flora y fauna existente y la tradición campesina de sus habitantes”, explicó: Isabel Cristina Buriticá, directora general del proyecto.
Este proyecto, hoy, está en proceso de actualización y avance donde las entidades territoriales Corantioquia y Cornare en conjunto proyectan la construcción de un parque que va a poseer 1.761 hectáreas (Ha.) dentro lo constituido como área protegida denominada Arví, que en su totalidad cuenta con 11.248 Ha. de suelo verde.
El parque contará con seis núcleos: Biodiversidad, La Represa, Histórico y Cultural, El Tambo, La Laguna y Mazo. Serán temáticos, recreativos y de estudios medio-ambientales, bajo la dirección de entidades como la Gobernación de Antioquia, Confama, Comfenalco, Área Metropolitana y algunas universidades del departamento.
El Metro de Medellín construirá la tercera línea de Metrocable desde la estación Santo Domingo hasta el corregimiento Santa Elena. El proyecto vinculará a los turistas en forma directa con el futuro Parque Arví, facilitando el desplazamiento de los mismos hacia el espacio ecoturístico que hoy se encuentra en vía de desarrollo.
Beneficio para unos, perjuicio para otros
Hablar con los habitantes de la zona denota un sinnúmero de sensaciones encontradas. Aún cuando la comunidad ve el proyecto como una oportunidad también siente incertidumbre con respecto a los cambios generados en su entorno.
“Yo lo veo como una oportunidad, en lo económico y turístico será positivo para la zona pero hay que tener cuidado que este turismo no impacte y se pierda la identidad, las costumbres y tradiciones de la región y no se influencie de los que vienen de afuera… lo más importante son los valores y la idiosincrasia de la comunidad”, afirma Juan Camilo Soto, guía turístico y habitante de la zona.
“Estamos a la expectativa de lo que va a pasar aquí, queremos conservar la tradición y tranquilidad que nos caracteriza, conservar la identidad campesina echada pa’ adelante y esperamos que se genere empleo para los habitantes del corregimiento”, argumenta Diana Lucía Alzate Alzate, líder comunitaria de la vereda Mazo correspondiente al territorio Arví
Estos son algunos pensamientos que hoy tienen los habitantes de Santa Elena, quienes le dan relevancia al proyecto Parque Arví, considerado como una buena posibilidad de progreso y reconocimiento, pero que a la vez se muestran inseguros y algunos otros reacios frente el impacto social, cultural y ambiental que se pueda generar en determinadas comunidades veredales.
Huele a naturaleza
Arví, un entorno ambiental constituido casi en su totalidad por espacios naturales de bosques húmedos en los cuales se encuentran 46 senderos ecológicos y prehispánicos establecidos por la misma comunidad, y con el apoyo de Corantioquia, gracias a la belleza paisajística que se encuentra en ellos, es un espacio que permite un encuentro reflexivo y de tranquilidad con el ser, el cual invita al respeto y la preservación de los pulmones verdes que ofrece la madre naturaleza.
En su entorno se puede encontrar variedad de paisajes, miradores, charcos, lagunas, patrimonios arqueológicos y especies de fauna y flora como las orquídeas, helechos, musgos, y una gran variedad de árboles “alta grande” en una aproximación de 600 especies, además de mamíferos, reptiles y aves como el barranquero, siendo éste el más característico de la región.
Un ambiente ecoturístico es un espacio en el que se privilegia la conservación y apreciación del medio, tanto natural como cultural. Esto es lo que busca Corantioquia con el proyecto Parque Regional Ecoturístico Arví, ofrecer un espacio con enfoque en la preservación de los ambientes naturales de más relevancia en el departamento de Antioquia y además una opción de inclusión turística para la sociedad.
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